viernes, 30 de junio de 2017

El espino blanco




El espino blanco era la casa de Ainhoa. Su familia vivía allí desde siempre y ella no imaginaba otro lugar mejor en el mundo. Cierra los ojos y sueña, revive las sonrisas, se deja mecer en el vaivén de la infancia juntos, acaricia sus manos, sus ojos y su corazón...

domingo, 25 de junio de 2017

Rêves deviennent réalité




Vane tenía un sueño:

"Quiero una casa en el campo, con una gran terraza y un prado verde por el que poder andar siempre descalza..."

Dicen que para que los sueños se cumplan es necesario visualizarlos con fuerza así que... voilá mon amie!

domingo, 18 de junio de 2017

Roc observa el universo





A Roc le encanta mirar el cielo. En las calurosas noches de verano sale al patio de casa que esta forrado de una hierba verde y mullida, se tumba cómodamente y observa con pasión toda la inmensidad del cielo nocturno. Ve viajar las estrellas, los planetas, los satélites lejanos e imagina miles y miles de cosas en su curiosa cabeza... se siente tan pequeño y tan grande a la vez, tan feliz, que siempre termina dormido al arrullo de las estrellas y su mamá lo abraza amorosa para llevarlo volando a la cama.

miércoles, 14 de junio de 2017

La pequeña ballena







Hace poco escuché que hay ballenas que susurran. Cuando una mamá ballena esta con su cría dando un paseo por las profundidades marinas, suelen jugar con las burbujas y con los miles de pececillos que les cosquillean las aletas. Mientras giran y giran, ellas cantan, hablan y ríen en su estupendo idioma haciendo que vibren los bigotes de las gambas cercanas. Pero si de repente la pequeña ballena advierte un peligro, nada sigilosa hacia su mamá y le susurra al oído para contarle con pelos y señales cual fue el motivo de tanto susto...-mamá, shhhh, mamá, no hagas ruido...-

lunes, 12 de junio de 2017

Juneta




Hay niñas como Juneta que no se conforman con lo que les dicen que tienen que ser, hay niñas como Juneta que se lanzan ladera abajo, cazan sapos y emiten diferentes sonidos cuando se suben a los árboles. Yo siempre quise ser una niña como Juneta, bailar como baila ella aunque cuchicheen, lanzar rayos y truenos de hielo para divertir a mis amigas, mirar con ojos de topo y olisquear con nariz ratoncillo de campo. Me encanta pintarle sus zapatillas, porque se que serán mágicas y traviesas, y cuando cierre los ojos, podré sentir  el suave murmullo de sus pisadas.