viernes, 28 de noviembre de 2014

Mi amigo el pingüino




Yo tengo un amigo al que llamo pingüino,
es blanco, negro y  también amarillo.
Si lo miras de cerca te puedes despistar,
pues sus relucientes plumas brillan como metal
y pelaje esplendoroso parecen  formar.

Yo tengo un amigo que es un pingüino
y en el continente antártico es mi vecino.
Juntos nos gusta ir a cazar
camarones, crustáceos y otros peces del mar
que por la tarde degustamos para merendar.

Yo tengo un amigo al que llamo pingüino,
es blanco, negro y también amarillo.
Cuando salimos de paseo siento felicidad
pues cantamos a graznidos con gran vitalidad
y nos reímos a carcajadas celebrando nuestra amistad.








domingo, 9 de noviembre de 2014

Los pequeños verros de Cardedeu




"Vet aquí que, fa molt de temps, a les muntanyes de Sant Hilari, hi vivia
un porc senglar de cos dur, recobert d’un pelatge negrenc i uns ullals
esmolats i recargolats que, segons expliquen els avis, era el més gros que
mai s’havia vist..."

"He aquí que, hace mucho tiempo, en las montañas de Sant Hilari, vivía un jabalí de cuerpo duro, recubierto de un pelaje negruzco y unos colmillos afilados y retorcidos que, según explicaban los abuelos, era el más grande que jamás se había visto..."

*Llegenda del verro de Cardedeu y la Festa del foc.






El rey de los pingüinos




El rey de los pingüinos contemplaba los icebergs una mañana de verano. Los miraba como cuando miramos la lluvia caer, viéndolos desplazarse lentamente por el agua helada, con un tímido vaivén flotante. Se preguntaba a qué lugar se estarían dirigiendo, dónde acabaría su viaje... de repente decidió zambullirse e ir hacia el barco de hielo más cercano, subiéndose a él momentos después. Llegó hasta lo más alto del bloque y plantó sus huellas aquí y allá dejando un mensaje pingüinil con el profundo deseo de que alguien pudiera algún día recibirlo..."para que tus pasos siempre sigan estas huellas"...